Por fin comenzamos nuestro viaje, después de más o menos un mes poniendo a punto a nuestra querida kombi, bautizada como Inti, la cual paso por las manos de la mitad de los mecánicos de Lima, pasando consulta por el planchador para renovar sus partes olvidadas, su revisión de motor con el maestro Pedro el mono, conociendo al experto en caja de cambios, el de chapas y cremalleras, el frenero, el eléctrico...
Además, la acondicionamos con una cama plegable y un pequeño mueblecito que hicimos con nuestras propias manos, convitiéndola en casa rodante.
La ruta comenzó con la prueba de fuego, la famosa subida a Ticlio (4818 msnm) que da acceso a la selva central, Inti estuvo muy bien en el primer tramo, pero al iniciar la parte mas dura no aguantaba mas de cinco kilometros seguidos... pues en cuanto se calentaba un poquito se paraba.
Por tanto, tuvimos que buscarle un repuesto al llegar a La Oroya pues aun nos faltaba más de la mitad de camino. Por suerte conocimos un amigo mecánico, el cual le cambió la bomba de la gasolina y continuamos la ruta sin más contratiempos.
Oxapampa nos recibió con los brazos abiertos aún habiendo llegado con un día de retraso! Después de viajar durante dos días para recorrer menos de 400 km; la energicleta hizo disfrutar a la gente, sobretodo a los más pequeños, los cuales después de pedalear toda la tarde, disfrutaron de la proyección gracias a la
energía que generaron durante la tarde.
Este primer viaje ha sido posible gracias a mucha gente pero sobretodo queremos agradecer la grandísima ayuda totalmente desinteresada que hemos recibido de los que ahora consideramos nuestros hermanos, Paulu y Anxos.
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